Cámara de Diputados realiza “Conferencias Magnas con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres”


“2025, Año de la Mujer Indígena”
LXVI Legislatura. “Soberanía y Justicia Social”


Boletín No. 2818






•    El Estado mexicano debe dedicar los recursos necesarios para detener la violencia contra las mujeres: Kenia López Rabadán

•    Las violencias contra las mujeres no son hechos aislados, son resultado de estructuras históricas que han normalizado la desigualdad: diputada Burgos Hernández (Morena)

•    Hay mujeres que viven violencia y no lo saben porque no todo son golpes: diputada Jiménez Godoy (Morena)


La Cámara de Diputados llevó a cabo “Conferencias Magnas con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres”, que se conmemora cada 25 de noviembre, con la participación de diputadas, de la artista y activista María Elena Ríos Ortiz y de Ceci Patricia Flores Armenta, madre buscadora. 

La presidenta de la Mesa Directiva, Kenia López Rabadán, sostuvo que cada vez más la sociedad, las autoridades, los presupuestos y el debate público se deben orientar a transformar y mejorar la realidad de las mujeres mexicanas, porque, dijo, la deuda de México es con las mujeres.

Al inaugurar el evento, la diputada presidenta hizo un llamado a destinar todos los recursos materiales y humanos para que las mujeres tengan una vida sin violencia.

“Estamos honradas de recibir a dos mujeres que han marcado con su trabajo, con su lucha, con su convicción, un antes y un después en la lucha de las mujeres (…) Vamos a tener dos conferencias magistrales, dos, y está hecho así para poder demostrar que cuando hay dos mujeres juntas, este país puede avanzar”, asentó.

Se trabaja para erradicar violencias hacia mujeres

A su vez, la diputada Anais Miriam Burgos Hernández (Morena), presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, expresó que hoy se reúnen para recordar y honrar la lucha contra la violencia de género, problemática que afecta a millones de mujeres en todo el mundo.

Recordó que desde 1999 la Asamblea General de la ONU decidió que cada 25 de noviembre se celebre, conmemore y se hagan acciones contundentes para el Día Internacional y acabar con la violencia contra las mujeres. 

“Ninguna mujer, ninguna niña debería vivir con miedo. Esta no es solo una declaración de principios, es un llamado urgente a la acción, a la responsabilidad compartida y a la transformación genuina de nuestra sociedad”, afirmó.

Dijo que las violencias contra las mujeres no son hechos aislados, son el resultado de estructuras históricas que han normalizado la desigualdad desde el feminicidio, la violencia física, patrimonial, psicológica, por interpósita persona, la digital, política por razón de género y muchos tipos de violencia, como la ácida, en donde el trabajo legislativo se orienta en su reconocimiento, misma que ya ha sido definida en las leyes y tipificada en los códigos penales, pero solo se ha avanzado en 13 estados; “nos falta más de la mitad”.

Mencionó que las legisladoras presidentas de las comisiones de Igualdad de Género del país, en coordinación con las secretarías de las Mujeres estatales y federales, firmaron el Pacto de Xicoténcatl por el derecho de las mujeres a una vida libre de violencias, el cual se suscribió a razón de la violencia sexual que en fechas recientes vivió la presidenta de la República y que muestra cómo la normalización social y la impunidad institucional incrementan el riesgo y reduce la libertad de las mujeres y las niñas. 

Ante ello –agregó-- comenzó la armonización legislativa de diferentes ordenamientos que atienden la violencia ácida y las desapariciones forzadas. La igualdad sustantiva no es una aspiración, es una obligación constitucional y un principio rector de la democracia. “Esto implica no solo la igualdad en la ley, sino en la realidad cotidiana, en el acceso a oportunidades, en la distribución del poder y en la eliminación de todas las barreras que perpetúan la discriminación”. 

Agradeció la invitación de la presidenta de la Mesa Directiva, diputada Kenia López Rabadán, para escucharse y trabajar en conjunto; reconoció su sororidad y compromiso que externó cuando asumió la presidencia. 

Indicó que desde la Comisión que preside se labora para seguir respaldando a todas las mujeres en todos los espacios del territorio nacional para erradicar las violencias. “Desde la Cámara de Diputadas y Diputados estamos trabajando fuertemente para erradicar las violencias que vivimos. En nosotras recae una responsabilidad histórica: cambiar esos marcos normativos que a veces tienen huecos y vicios legales que no nos dejan avanzar”.

Mujeres merecen vivir libres, plenas y sin miedo

La diputada Gabriela Georgina Jiménez Godoy, vicecoordinadora del grupo parlamentario de Morena, agradeció la invitación de la diputada López Rabadán a conmemorar este día tan importante porque “hoy no estamos aquí solamente diputadas representando diferentes partidos”, sino más bien estamos representando a otras mujeres, dándoles voz en el Congreso y legislando para ellas, mujeres que merecen vivir libres, plenas y sin miedo”.  

Resaltó que el machismo, la violencia y el patriarcado están muy arraigados en todos los lugares y rincones; y hay mujeres que viven violencia y que no lo saben, porque no todo son golpes, hay muchos tipos de violencia que ellas a veces no saben identificar. 

Por ello, dijo, se necesitan mujeres valientes, que sigan levantando la voz sin miedo, que visibilicen lo que hace falta, y “que sepan que aquí en la Cámara de Diputados tienen grandes aliadas y amigas para que sigamos legislado a favor de ellas”. 

Afirmó que los derechos no se imploran, se conquistan; y las mujeres que hacen historia no es por obedientes, siempre ha sido por ser rebeldes. Invitó a seguir levantando la voz, organizarse, avanzar y encontrar coincidencias, a “hacernos fuertes entre nosotras para poder realmente transformar a nuestro país”. 

Nadie está exenta de vivir algún tipo de violencia 

Al dictar la conferencia “Ley Malena: Una lucha que resiste en la piel”, María Elena Ríos Ortiz, artista y activista, agradeció a las diputadas la invitación a participar en este evento y luchar desde este recinto legislativo, ya que es muy importante generar este vínculo y comunicación para “seguir trabajando en favor de las compañeras porque nadie está exenta de vivir algún tipo de violencia y muchas veces no nos damos cuenta que la vivimos porque la normalizamos”.     

Recordó que el 9 de septiembre de 2019 la intentaron matar con ácido y “mi caso ha durado seis años y no se tiene sentencia condenatoria para ninguno de los agresores”. Y, posiblemente, “no voy a tener una justicia completa porque a mí nadie me va devolver la piel con la que nací, pero sí podemos hacer justicia de otras maneras: legislando”.

Cuando yo viví esta situación, añadió, “me pareció increíble que no estuviera tipificada”; entonces, se comenzaron a tocar puertas y varios congresos empezaron a tipificar algunas cosas. “No ha quedado de manera completa, pero es importante legislar en cada estado de la República porque cada uno es independiente”. 

Era muy claro --refirió-- que “se tenía que tipificar y reconocer un nuevo tipo de violencia y de ahí nace la Ley Malena que busca erradicar la violencia acida”, que es cuando se quema a una mujer con ácidos, sustancias corrosivas, tóxicas, inflamables, irritantes o líquidos en altas temperaturas. 

Indicó que ya está reconocida en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, pero se necesita también la acción en el Código Penal Federal y “se comenzó a tipificar como feminicidio en grado de tentativa cuando queman el cuerpo de una mujer y se incluyeron agravantes”. Hasta hace casi tres semanas eran 17 estados, y Zacatecas ya se sumó, falta que lo publique. “Ya existe la legislación, ahora vamos por las sentencias condenatorias”. 

Lucha de las madres buscadoras es auténtica

Con la conferencia “Madre buscadora, crónica de la desesperación”, Ceci Patricia Flores Armenta, madre buscadora, activista y fundadora del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, llamó a sensibilizarse sobre el tema de desaparecidos y de las y los huérfanos por ese motivo, así como ser empáticos y evitar la revictimización por parte de la ciudadanía. 

Afirmó que la lucha de las madres buscadoras es auténtica, por amor y necesidad de encontrarlos “porque no tuvimos el apoyo de las autoridades y, en muchas ocasiones, de la ciudadanía, y hemos tenido que hacer esa búsqueda con base en dolor, lágrimas y sacrificios”. Por ello, pidió aplausos por las madres y los desaparecidos.

Se pronunció por la no repetición, pero sí por la justicia. “Nosotras decimos: no buscamos culpables, porque ya los tenemos. Queremos que la autoridad los busque y den el castigo que merecen por desaparecer, porque nadie merece desaparecer. Todos como humanos merecen ser buscados y regresar a casa”.   

La activista comentó que mientras se viva en impunidad esto seguirá; el tema de los desaparecidos es silenciado, y como buscadoras sufren apatía, revictimización, burocracia e impunidad no solamente de las autoridades sino de la sociedad que cuestiona su lucha. “Hay que ser sensibles con el tema; nadie debería esperar tener un familiar desaparecidos para ser sensibles ni tener un niño en casa sin padre para ser sensible con el tema de los huérfanos”.

Hizo votos para que no haya más niños con padres desaparecidos, en orfandad, con muchas carencias y sin el mínimo apoyo del gobierno, ya que ningún gobierno “hasta ahora toca el tema de los huérfanos, ningún gobierno dice que le va a dar becas a los huérfanos, solamente las madres buscadoras”.

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“2025, Año de la Mujer Indígena”
LXVI Legislatura. “Soberanía y Justicia Social”

Palacio Legislativo de San Lázaro, a 24 de noviembre de 2025

DIPUTADA KENIA LÓPEZ RABADÁN
Presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados 

Mensaje durante las conferencias magnas: Con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, en el Palacio Legislativo de San Lázaro.


Muchas gracias.

Primero que nada, decirles a todas, bienvenidas a esta Cámara de Diputados. Bienvenidas porque su presencia hoy aquí es absolutamente trascendente para quienes hacemos las leyes, para quienes buscamos construir, desde nuestras distintas visiones, sí, pero sobre todo desde el servicio público, un mejor país para las mujeres. 

Hoy es un día importante para nosotras. Primero que nada, porque esta es una mesa plural, como plural es el país, como plurales son las familias y como plural es el Congreso, y no hay tema más alineado a la construcción de acuerdos que los temas de mujeres. 

Es algo que hemos vivido todas, porque podemos tener distintas visiones como grupos parlamentarios, pero cuando se trata de construir a favor de las mujeres, hay una prioridad y son las mujeres. 

Hoy estamos en esta Cámara de Diputados, verdaderamente honradas, esa es la palabra.  Estamos honradas de recibir a dos mujeres que han marcado con su trabajo, con su lucha, con su convicción, un antes y un después en la lucha de las mujeres. 

Vamos a tener dos conferencias magistrales, dos, y está hecho así para poder demostrar que cuando hay dos mujeres juntas, este país puede avanzar. 

Yo quiero, primero que nada, agradecerle a mi querida Ceci Flores su presencia aquí en la Cámara de Diputados. Gracias, Ceci, por tu valentía, por tu resiliencia, porque, de algo que se vuelve absolutamente difícil para un ser humano y más para una madre, y es que les desaparezcan a sus hijos, tú con ese dolor has transformado ese dolor en valentía. 

Tu presencia aquí hoy, querida Ceci, acompañada, por cierto, y quiero poner énfasis en eso, de más madres buscadoras, nos hace reconocer cómo de manera solidaria, sororaria, como hermanas, podemos encontrar un mejor presente y sobre todo un mejor futuro. 

Quiero agradecer su presencia aquí, a Carmen Suárez Salomón, muchas gracias, querida Carmen, una madre buscadora que hoy está aquí, gracias, en la Cámara de Diputados, gracias por tu presencia.

A Ana Luz Juárez Nava, gracias, querida, por estar aquí.

A Lidia Hernández Reyes. Gracias a estas madres buscadoras que buscan en muchas ocasiones con sus propias manos a su familia.

Hoy aquí, en la Cámara de Diputados, les decimos gracias por su trabajo, por su amor a su familia y por su amor a la patria. 

Hay distintas formas, lo ha dicho muy bien aquí nuestra Presidenta de la Comisión, hay distintas formas de violencia, incluso hemos tipificado nuevas formas de violencia, porque pasamos de esas violencias históricas que nos han dolido tanto, como es la violencia económica, la violencia física, la violencia psicológica, esas violencias tienen nuevas formas de materialización. 

Y hoy tenemos en esta Cámara de Diputados a María Elena Ríos, activista y saxofonista, que va a pasar a la historia de este país por la “Ley Malena”.

Querida María Elena, todas aquí sabemos, porque hemos sufrido en carne propia algún tipo de violencia, todas, lo dicen las estadísticas, lo dice el Inegi, y estoy segura que todas aquí lo sabemos, todas hemos vivido algún tipo de violencia, reconocemos en la violencia que ejercieron hacia ti, por eso, tu valentía, tu inteligencia, tu resiliencia y esa forma de darle a las mexicanas el ejemplo de que nadie te puede lastimar a tal grado, aunque eso quiera, porque las mujeres somos mucho más que un agresor. 

Gracias, querida Malena por estar aquí, gracias por tu trabajo, gracias por tu ejemplo. 

En esta mesa, amigas, tenemos a dos de las mujeres con mayor ejercicio público en la toma de decisiones, y yo quiero agradecerles a ellas por estar aquí, de manera plural, de manera sororaria:

Mi querida vicecoordinadora Gabriela Jiménez, gracias. Gracias porque, déjenme les informo, Gaby y yo formamos parte de varios colectivos nacionales, desde hace muchos años ya, y para mí saber que su grupo parlamentario le define un cargo como vicecoordinadora, es una muestra clara de que las mujeres debemos trabajar de manera disciplinada, de manera sororaria con más mujeres, como lo hemos hecho en estos colectivos desde hace muchos años. 

Mi querida Gaby, tu presencia aquí nos demuestra que claro que se puede, que claro que cada quien con su visión puede argumentar, pero sobre todo que estamos aquí para escuchar a dos mujeres que nos han enseñado y nos seguirán enseñando, desde la sociedad, cómo se deben hacer las cosas en el servicio público. Muchas gracias querida Gaby.

Si pudiéramos materializar las discusiones en esta Cámara de Diputados a favor de la mayoría, quien hoy tiene esa gran responsabilidad, porque la mayoría de los mexicanos somos mujeres, es nuestra presidenta de la Comisión de Igualdad. Muchísimas gracias Anaís por estar en esta mesa.

Efectivamente, gracias por esa mención, esa llamada, yo estoy convencida, querida presidenta de la Comisión de Igualdad, que, con tu trabajo en esta legislatura, lo que haga la diputada Lili Ortiz, lo que haga la diputada Nancy, de Puebla y Nuevo León o cualquiera de nuestras diputadas de todos los grupos parlamentarios, en tu Comisión con sus iniciativas y la materialización de tu trabajo, este país va a ser mucho mejor.

Hay una obligación ética de nuestra parte como legisladoras para decir en dónde estamos parados. Y yo inicio diciendo: la mayor oportunidad de este país es reconocer y apoyar plenamente a las mujeres.

Cada vez más la sociedad, las autoridades, los presupuestos y el debate deben estar orientados a transformar y mejorar la vida de las mujeres mexicanas, sobre todo destinando todos los recursos materiales y humanos para tener una vida sin violencia.

Quiero compartir con ustedes algunas cifras, sabiendo que en cada cifra hay una historia de violencia y que el dolor está en las historias. Las cifras nos dan dimensión de la realidad y de la urgencia de este país. 

Las mujeres dedicamos 40 horas a la semana, es decir, una jornada laboral completa a labores de trabajo no remunerado. Las mujeres 40 horas, los hombres sólo 16.

El 70 por ciento de las mujeres mexicanas mayores de 15 años han vivido algún tipo de violencia. Siete de cada diez mujeres según el INEGI en este país han o hemos sufrido violencia.

El 42 por ciento de las mujeres mexicanas vivió violencia antes de cumplir 15 años.  Pensemos en nosotras, en nuestras amigas, en nuestras vecinas. Es necesario proteger a nuestras niñas, es necesario generarles las condiciones para que no más vuelvan a ser violentadas.

Hay en 2021, una cifra que nos hace, porque el ENDIREH es, digamos, de ese año y es el dato que podemos hoy transmitir, que nos hace verdaderamente preocuparnos: 800 carpetas de violencia familiar al día, 800 carpetas. Eso significa que la mujer sufrió violencia, pero además rompió ese estigma de quedarse con la violencia, digamos, en lo personal y acudió a una autoridad.

Amnistía Internacional, señala que 97 por ciento de las madres buscadoras han sufrido violencia en sus labores de búsqueda, 97, mi Ceci. Por eso es que hoy te decimos gracias, a ti y a todas las madres buscadoras de este país, porque han tenido que vivir esa violencia y, además, lamentablemente, en muchas ocasiones se replica desde las instituciones, esas que debimos construir para cuidarnos o para encontrarnos.

Es, sin lugar a dudas, lamentable la deuda que tenemos en nuestro país, porque la deuda de México es con las mujeres.

Agradezco enormemente a nuestras invitadas por compartirnos hoy su lucha. Escucharlas y respaldarlas es la única forma en que dejemos de exponerlas a la violencia que nuestro país les ha impuesto.

Gracias, querida Ceci, gracias, querida Malena, gracias por su ejemplo y por su lucha.

Aquí estamos, de manera plural, sí, de manera sororaria, sí, de manera institucional, sí, para escucharlas y agradecerles siempre.

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