Este 11 de julio se conmemora el Día Mundial de la Población y no podemos hablar del tema sin tocar el cambio climático por las intrínsecas interacciones que sacuden cada vez con mayor violencia al planeta debido a fenómenos naturales extremos manifestados en sequía, desertificación de amplias zonas, inundaciones, aumento de la temperatura y sin ánimos catastrofistas, y a decir de expertos, el daño es irreversible. Nuestro hábitat solo puede albergar 10 mil millones de personas y ya somos ocho mil millones.
Un grupo de investigadores de la Climate Central, un grupo independiente de científicos y comunicadores que investigan e informan de los hechos acerca del cambio climático y cómo afectan la vida de las personas, analizó el año pasado las temperaturas de 180 países y 22 territorios y determinó que 98 por ciento de la población mundial estuvo expuesta a temperaturas más elevadas debido a la contaminación por dióxido de carbono.
l cambio climático es causado por las emisiones que atrapan el calor y que se producen al quemar carbón, petróleo y gas natural, la tala de bosques, los incendios forestales, entre otras razones. Las emisiones provienen de sistemas de producción que emiten grandes cantidades de carbono además de patrones de consumo y estilos de vida de las personas relativamente más ricas.
En ese sentido, la Unión de Científicos Conscientes -organización que declara en su página que su trabajo depende de las donaciones que reciben de las personas en general, y no aceptan dinero del gobierno ni de empresas con el fin de mantener su integridad e independencia- asegura que 10 por ciento de la población global -que incluye las personas más ricas del mundo- es responsable del 50 por ciento de las emisiones de calentamiento global cada año y “es injusto que los impactos del cambio climático caigan de manera desproporcionada sobre las mismas poblaciones que menos contribuyen al problema”.
Para estos científicos es errado considerar que el crecimiento poblacional sea responsable del cambio climático y haya relación directa en el incremento de las emisiones con el aumento de la población. Señalan que la verdadera fuente de esas emisiones es “un aumento en el número de carros, centrales eléctricas, aviones, industrias, edificios y otros elementos de nuestra economía y estilo de vida que dependen de los combustibles fósiles”.
Pero esa actividad que despliega la industria automotriz, eléctrica, los nuevos asentamientos humanos, la industria del vestido, etcétera, son para consumo humano, que en algunos casos es altamente contaminante y consumidora de grandes volúmenes de agua. En algún momento estos científicos reconocen que los impulsores principales de estos problemas son el consumo y las decisiones de producción tomadas desde lejos, como la tala de bosques, criar ganado o sembrar cultivos comerciales para la exportación.
Niegan que la población contribuya de manera pareja a la producción de emisiones que atrapan el calor, pues “los datos muestran que el 10 por ciento de la población global que incluye las personas más ricas del mundo es responsable del 50 por ciento de las emisiones de calentamiento global cada año. Y una realidad supremamente injusta es que los impactos del cambio climático caen de manera desproporcionada sobre las mismas poblaciones que menos contribuyen al problema”.
La UCC también niega que la escasez de recursos justifique el control poblacional, cuando el foco debería estar en un sistema centrado casi exclusivamente en las ganancias corporativas y no en las necesidades de la sociedad. Alertan que con esos argumentos de la sobrepoblación se promueve el control poblacional y abusos de derechos humanos, “como la esterilización forzada y los límites al tamaño de los hogares, que principalmente afectan a comunidades negras, indígenas y de otras razas y etnias marginadas y a personas de bajos ingresos”.
En 15 años más habrá 9 mil millones de personas “y aparecerán 3 mil millones de nuevos consumidores de clase media en los próximos años”. Con esos resultados, la demanda de recursos se incrementará exponencialmente.
Lo cierto es que en 2030 el mundo necesitará, al menos, 50 por ciento más de alimentos, 45 por ciento más de energía y 30 por ciento más de agua, según reporta la Fundación Aquae.
De acuerdo con las estimaciones de esa Fundación, en 2050 se estará alcanzando y quizá rebasando la población crítica de 10 mil millones de personas: Si ya somos 8 mil millones y la población de África aumentará a más del doble para 2050 a 2.500 millones de personas, y Asia lo hará en 20 por ciento y 30 por ciento en India. Y qué decir del fenómeno migratorio. Desde 2008, 155 millones de personas han tenido que desplazarse por un corto o largo plazo a consecuencia de algún desastre natural. Estos fenómenos desplazan más gente que las guerras.
Otras estimaciones prevén que para 2100 la población del planeta se estabilizará entre los diez y doce mil millones de habitantes, que consumen y contaminan recursos afectando visiblemente los mantos acuíferos, los casquetes polares, los suelos fértiles, los bosques, la pesca y los océanos, pero los países ricos consumen de forma desproporcionada.
Los científicos buscan afanosamente las cusas del calentamiento global y cómo resolverlas para preservar la vida en el planeta, pero no se atreven a señalar los desequilibrios ocasionados por la actividad humana y el crecimiento poblacional, ante la posibilidad de un futuro distópico. Las profundas asimetrías económicas, culturales educativas, etcétera, son condiciones que alteran este hábitat que nos es común, pero ni políticos, ni científicos ni sociedad se ponen de acuerdo en tomar las riendas de un futuro incierto.
Con información de: Fundación Aquae, “Cambio climático y crecimiento demográfico: los retos para el planeta”: https://bit.ly/3XIqx9B -The Conversation-Xataka “7.500 millones y aumentando: ¿cuántas personas puede soportar la Tierra?”: https://bit.ly/4eEeznx -Euronews Green con Reuters (2023),"Prácticamente nadie en la Tierra escapó": el 98% de la población mundial expuesta al calentamiento global este verano: https://bit.ly/3xCfZhC