Este 1º de octubre inaugura un tiempo nuevo la Quinta Presidencia de la República del siglo XXI. Sus pilares son la democracia, la pluralidad, la alternancia, la participación ciudadana, el Estado de Derecho, las instituciones. Como lo fueron para los sexenios, a partir del año 2000, de Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa (PAN); Enrique Peña Nieto (PRI) y Andrés Manuel López Obrador (Morena).
La Quinta Presidencia del siglo XXI es histórica. Por primera vez una mujer será la titular del Poder Ejecutivo y también la jefa Suprema de las Fuerzas Armadas. Afronta desafíos, entre ellos salvaguardar la democracia, asegurar que los principios democráticos sigan definiendo el rumbo de México, resumió la diputada Amalia García Medina (MC).
Para la legisladora, la prioridad es que la presidenta de la República tenga visión de Estado. Su liderazgo no deberá ser asunto de fuerza o autoritarismo. Lo primero es convocar a un gran acuerdo nacional para solucionar los problemas más urgentes como la inseguridad pública. Se necesita un nuevo paradigma: desmantelar la militarización, cuya presencia ocupa funciones y tareas del gobierno civil, como la construcción de obras, un poder que no tenían las fuerzas armadas.
Inspirada en una máxima del filósofo Jorge Agustín Nicolás Ruiz de Santanaya (el hombre que no conoce su historia está condenado a repetirla) la legisladora enfatizó que las presidencias de la República del siglo XXI no son espontáneas, sino producto de momentos históricos que no deben olvidarse.
Stefan Zweig nos legó “Momentos estelares de la humanidad”. En esta estela, Amalia García borda el arte de la miniatura histórica para precisar los acontecimientos sobresalientes que marcaron el rumbo, los puntos clave de inflexión que culminaron en las presidencias del siglo XXI.
García Medina evocó los días del ayer: México no era libre ni democrático; el PRI era el partido de Estado autoritario; líderes sociales sin posibilidad de participación política legal eran acosados a la mínima expresión; parte de la oposición encarcelada; represión a estudiantes; surgimiento de grupos guerrilleros; la Guerra Sucia; desaparición de disidentes...
Desde el poder político se concluyó: era insostenible no permitir la manifestación de otros puntos de vista, voces y expresiones. Con visión de Estado, el exsecretario de Gobernación, Jesús Reyes Heroles, dialogó y acordó con la oposición garantizar un nuevo e incipiente paradigma plural: el Sistema Electoral Mixto, que sigue existiendo (con diversas reformas). Garantizó la representación en los espacios de poder plural (las cámaras federales, locales y en los ayuntamientos).
En 1979, por primera vez, llegó la Coalición de Izquierda con el Partido Comunista y otras fuerzas al Congreso de la Unión. Con formidables líderes como Arnoldo Martínez Verdugo y Gilberto Rincón Gallardo.
Jesús Reyes Heroles promovió diálogo y conciliación. Renuncia a prácticas estatales rígidas. Nació la Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procedimientos Electorales (LOPEE). Buscó democratizar el sistema electoral al permitir la participación de minorías en el Congreso.
Los partidos políticos fueron definidos como entidades de interés con igual derecho a acceder a los medios de comunicación; estableció la validez de sus registros conforme a los resultados electorales y amplió el número de representantes en la Cámara de Diputados, elegidos por mayoría relativa y bajo el principio de representación proporcional. Propició el registro del Partido Comunista Mexicano (PCM), Partido Socialista de los Trabajadores (PST) y del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT.
Al final del siglo XX se construyó un andamiaje electoral, institucional, plural y diverso. Se consolidaron instituciones que dieron solidez a la democracia, como el IFE (el actual INE).
Hoy, la democracia del siglo XXI, que posibilitó la Quinta Presidencia, es una pluralidad más rica gracias a las “acciones afirmativas”, pues representan diversas visiones del México real: población afromexicana, jóvenes, la diversidad sexual, mexicanos en el exterior. A esto se suma la rendición de cuentas, el INAI…
Los ecos de “Sapere aude” (“atrévete a saber”) expresión latina popularizada por el filósofo Immanuel Kant, en su ensayo “Respuesta a la pregunta: ¿qué es la Ilustración?” sobrevuelan en la oficina de Amalia García, quien alude a esta fuente filosófica para colocar los reflectores sobre otro nuevo paradigma que determinó las presidencias del siglo XXI: la mutación de súbditos a ciudadanos.
Explicó: prevalecía el viejo paradigma de la subordinación. Éramos visualizados como súbditos ante el poder omnipresente, autoritario y antidemocrático del PRI-gobierno.
Los sismos de 1985 marcan un antes y un después en materia de participación ciudadanía. Ante la tragedia, el expresidente Miguel de la Madrid Hurtado y su gobierno se quedaron pasmados. La gente salió a las calles y se organizó para remover escombros, rescatar víctimas, localizar cuerpos, edificar albergues, improvisarse como paramédicos. Esfuerzo colectivo espontáneo: el despertar de la conciencia social y de la ciudadanía.
Asimismo, destacan otros movimientos de ciudadanos pensantes y actuantes, como la lucha de los colectivos por la presentación de desaparecidos y la liberación de los presos políticos.
García Medina concluyó: como ciudadanos debemos desempeñar, en todo momento, un papel crítico y protagónico para seguir construyendo sociedades más democráticas, tolerantes y participativas.
*Reforma fiscal progresiva. No a los que menos tienen ni a la clase media. Los que más tienen deben aportar más. En la pandemia los más poderosos se hicieron más ricos, como Carlos Slim, porque se multiplicó el uso del Internet.
*Imperativo establecer un nuevo paradigma político y moral. Un liderazgo a la altura de nuestro tiempo, basado en tener visión de Estado, de contrapesos.
*Tener mayoría requiere el equilibrio de la representación de las minorías. Además del derecho de votar, es fundamental tener representación (objeto del sufragio).
*El reconocimiento de la democracia como la única vía, en un marco de paz.
Robustecer la participación ciudadana.
*Invertir más en educación, salud, combate a la pobreza, justicia y seguridad.
*Mantener el sistema mixto electoral. Hay quienes quieren desaparecerlo. Por ejemplo, eliminar los plurinominales. Anularía la representación plural de muchas voces y pensamientos de México.
Acuerdos México-Estados Unidos en materia de inseguridad. Ambos países comparten responsabilidades. El 90% de las armas de alto poder del crimen organizado mexicano proceden de la industria bélica de la nación vecina.
Nuevo paradigma en seguridad pública. Hacer comunidad. Acento en la prevención. Profesionalizar las corporaciones policiacas civiles, especialmente en los municipios.
Citó al Premio Nobel de Economía 1998, Amartya Sen, impulsor del concepto de desarrollo como libertad. Pobreza, desempleo y falta de oportunidades son obstáculos para las libertades fundamentales. Desarrollo significa expandir la libertad de las personas.
Por esto es fundamental invertir en salud, en educación universal y de calidad, en empleo digno. Cuestionó a Andrés Manuel López Obrador, quien pregona la disminución de la pobreza y el aumento al minisalario. Sin embargo, el 57% de la población está en la informalidad, carece de salario mínimo y vive en precariedad.
Urge garantizar al 100% salarios dignos, salud y educación de calidad, vivienda adecuada. Pero con cuáles recursos si el presupuesto se fue a las obras del sexenio, aspirando recursos de fideicomisos esenciales a la población (como los destinados al sector agropecuario).