Los estereotipos de género persisten en la política. Las mujeres a menudo enfrentan juicios basados en su apariencia, voz o estilo de mandato. A pesar de los avances, siguen siendo minoría en puestos de liderazgo político. Menos del 10% de los países tienen jefas de Estado o de Gobierno. Las mujeres líderes enfrentan violencia y amenazas, la seguridad personal es un desafío constante. A lo anterior podemos añadir las dificultades para conciliar vida familiar y política, así como la falta de programas de apoyo, que es el caso del cuidado infantil accesible.
Por otro lado, enfrentan dificultades de acceso a financiamiento y recursos para sus campañas. Esto afecta la posibilidad de competir en igualdad de condiciones con los hombres. Sin embargo, a lo largo de la historia, las mujeres que lograron un cargo como presidenta, primera ministra o canciller, han demostrado su potencial rompiendo barreras y prejuicios. Dejaron una huella significativa en la política mundial, lo que confirma que el liderazgo no tiene género.
Es el caso de Sirimavo Bandaranaike, quien fue la primera mujer en el mundo en ser elegida primera ministra de un país en 1960. Además, también fue presidenta de Sri Lanka en 1970-1977 y 1994-2000. Así han surgido otros personajes, como María Estela Martínez de Perón, conocida como Isabel Perón (presidenta de Argentina, 1974-1976). Sucedió a su esposo, el presidente Juan Domingo Perón, después de su muerte en 1974. Enfrentó desafíos como la inflación, la violencia política y las protestas de trabajadores. Finalmente, fue arrestada y exiliada en España en 1981.
Violeta Barrios de Chamorro. En 1990 los nicaragüenses la eligieron presidenta y se convirtió en la primera mandataria electa en América Latina. Fue un momento crucial en la historia de Nicaragua, marcando un cambio significativo en la dirección política del país.
Michelle Bachelet fue la primera presidenta de Chile; su mandato abarcó dos periodos no consecutivos: de 2006 a 2010 y de 2014 a 2018. Destacó por su enfoque en los derechos humanos, la igualdad de género y la justicia social. Fue incluida en la lista Time 100 en 2018 y 2019, que destaca a las personas más influyentes del mundo. Después de su presidencia, Bachelet asumió el cargo de Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Implementó reformas a fin de garantizar la educación gratuita y de calidad a los chilenos.
Vigdís Finnbogadóttir. En 1980 marcó un hito en Islandia al ser la primera mujer presidenta del mundo elegida por medios democráticos. Vigdís se mantuvo en el cargo durante 16 años, convirtiéndose en la presidenta con más tiempo en un gobierno.
Hay mujeres que no sólo han sido relevantes en los gobiernos de su país, sino que se volvieron un ejemplo a nivel global. Es el caso de Angela Merkel, quien fue la primera canciller de Alemania desde noviembre de 2005 hasta diciembre de 2021. Durante estos 16 años, Merkel demostró habilidad excepcional en la política y el liderazgo.
Antes de ser canciller, ocupó cargos relevantes: fue ministra federal de Medio Ambiente, Conservación Natural y Seguridad Nuclear de Alemania, entre 1994 y 1998. También, ministra federal de Familia, Tercera Edad, Mujer y Juventud de 1991 a 1994. Su formación como doctora en química cuántica y su experiencia desarrollada bajo el régimen comunista en Alemania oriental la prepararon para liderar su país.
Merkel enfrentó el colapso financiero mundial de 2008 y la amenaza de disolución de la Unión Europea; la crisis migratoria en 2015 y la creación de una deuda común para financiar los fondos de recuperación de la pandemia. Su manera de manejar las adversidades políticas y económicas fueron fundamentales para la estabilidad de Alemania y Europa.
Indira Gandhi fue la primera mujer en acceder al cargo de primera ministra en India de 1966 a 1977 y desde 1980 hasta su asesinato el 31 de octubre de 1984. La lucha por la independencia marcó su infancia y el deseo de una India unida.
Se distinguió por apoyar los derechos humanos y la igualdad de género. Enfrentó desafíos políticos, económicos y sociales. Emprendió decisiones importantes en seguridad nacional y la modernización del país. También destacó en la arena internacional, donde defendió la soberanía de India y abogó por la paz mundial.
Jacinda Ardern. Primera ministra de Nueva Zelanda desde octubre de 2017 hasta enero de 2023. Destacó por su estilo de liderazgo empático y efectivo. Asumió el cargo a la temprana edad de 37 años, convirtiéndose en la jefa de gobierno más joven del mundo en ese momento. Además de ser primera ministra, Ardern ocupó el cargo de ministra de las Artes, Cultura y Patrimonio desde octubre de 2017 hasta noviembre de 2020.
Margaret Thatcher, conocida como la Dama de Hierro, fue la primera ministra del Reino Unido desde 1979 hasta 1990, siendo la persona que ocupó este cargo durante más tiempo en el siglo XX. Dejó un legado profundo y controvertido en la política británica y mundial.
Thatcher implementó políticas económicas neoliberales que incluyeron la privatización de empresas estatales, la reducción del poder de los sindicatos y la promoción del libre mercado. Estas reformas transformaron la economía británica, aunque también generaron desigualdades y controversias. Su firmeza en política exterior destacó durante la Guerra de las Malvinas, en 1982, donde lideró a Reino Unido en la recuperación de las islas tras la invasión argentina. Promovió la desregulación de la economía y la privatización de industrias clave como la energía, el agua y el transporte. Estas medidas buscaban aumentar la eficiencia y la competitividad, aunque también enfrentaron críticas por sus efectos sociales.
Con los ejemplos anteriores es de llamar la atención que, a la fecha, ninguna mujer haya tenido aún la posibilidad de asumir el cargo de presidenta de los Estados Unidos, a pesar de la presencia de mujeres notables en el ámbito político, y que ya han competido por el puesto. Sin embargo, cabe la posibilidad de que esta situación cambie con Kamala Harris, ya que podría ser la primera presidenta de los Estados Unidos en las próximas elecciones en el mes de noviembre.
Si esta situación llega a concretarse seguramente propiciará un giro interesante en la política mundial. De acuerdo con María Antonia Sánchez -Vallejo, especialista en política internacional, Kamala Harris nunca ha sido delfín de Biden, ni siquiera subordinada. Tiene un carisma indiscutible y es reconocida por su risa franca y espontaneidad, aunque por lo mismo se ha convertido en materia de memes y burlas de la oposición.
En su defensa, asegura la periodista, Kamala Harris tiene más experiencia y trayectoria política que Donald Trump. Demostrándolo con su memorable discurso en la Convención Nacional Demócrata de 2012, que la catapultó a nivel nacional, posteriormente compitió por el escaño del Senado. Harris se presentó con un programa basado en reformas en materia de inmigración y justicia penal, aumentos del salario mínimo y protección de los derechos reproductivos de las mujeres. Ganó sin complicaciones el puesto. Es así como los republicanos la consideran aspirante potencial para ser la primera presidenta de EE. UU.
Pero el caso de Estados Unidos no es único en el mundo, otro ejemplo es el de España, país que nunca ha tenido una mujer como jefa de Estado. Desde la aprobación de la última Constitución en 1978, sus ocho mandatarios han sido hombres.
En Latinoamérica ha sido distinto, se han registrado más de 15 mujeres al frente de los gobiernos de un total de 11 países, la última incorporación a esta lista será la próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
De acuerdo con la ONU, actualmente 26 países tienen a una mujer como jefa de Estado o de Gobierno, Europa encabeza la lista con 12 países gobernados por mujeres, seguida del Continente Americano con seis, incluyendo a la próxima presidenta de México. Entre ellas se encuentran:
Sandra Mason, de Barbados, (desde noviembre de 2021); Sylvanie Burton, en Dominicana, (desde octubre de 2023); Xiomara Castro, en Honduras, (desde enero de 2022); Dina Boluarte, en Perú, (desde diciembre de 2022); Christine Kangaloo, en Trinidad y Tobago, (desde marzo de 2023).
Katerina Sakellaropoulou, Grecia, (desde marzo de 2020); Giorgia Meloni, en Italia, (desde octubre de 2022); Judith Suminwa, de República Democrática del Congo, (desde abril de 2024); Sahle-Work Zewde, en Etiopía, (desde octubre de 2018); Sheikh Hasina, en Bangladesh (desde enero de 2009); Droupadi Murmu, en India, (desde julio de 2022).