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Producirán más combustibles fósiles que no limitarán el calentamiento global a 1.5 °C


Juventina Bahena

El cambio climático, las transformaciones provocadas por el hombre en la naturaleza y los crímenes que perturban la biodiversidad, como la deforestación, el cambio de uso del suelo, la producción agrícola y ganadera intensiva o el creciente comercio ilegal de vida silvestre, pueden acelerar el ritmo de destrucción del planeta, reporta Naciones Unidas.

Los ecosistemas sustentan todas las formas de vida de la Tierra. De la salud de nuestros ecosistemas depende directamente la salud de nuestro planeta y sus habitantes. Restaurar aquellos que están dañados ayudará a acabar con la pobreza, a combatir el cambio climático y prevenir una extinción masiva.

Necesitamos, expresa Naciones Unidas, un cambio hacia una economía más sostenible que funcione tanto para las personas como para el planeta. Promovamos la armonía con la naturaleza y la Tierra.

Sin embargo, parece que nos hemos acostumbrado a las cifras catastróficas, sin que haya acciones concertadas en las que todos y cada uno participemos. Solo podemos recordar con añoranza el enjambre de luciérnagas que aparecía en temporada de lluvias en una pequeña colina cercana, las enormes mariposas blancas o amarillas. Ahora solo se ven en santuarios. Los bancos de neblina y nieve se están esfumando. El pasto verde también desaparece. No podemos vivir sin la belleza natural de la Madre Tierra, menos sin el alimento que nos provee y la salud que nos procura. Pero nosotros somos el mal y también la cura.

No ha pasado la era de los combustibles fósiles

De todos los males que aquejan al planeta el que más ha ocupado a organismos, gobiernos y científicos, el cambio climático resulta ser el más impactante y éste fue abordado de manera decidida en la 28ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se celebró en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) del 30 de noviembre al 12 de diciembre de 2023.

Ahí hubo un reconocimiento de casi 200 países, de la necesidad de abandonar los combustibles fósiles.  Sin embargo, se reconoció que aún no se ha pasado la página de la era de los combustibles fósiles, pero “este es el principio del fin”, declaró el Secretario Ejecutivo de las Naciones Unidas para el Cambio Climático, Simon Stiell.
 Para el secretario general de la ONU, António Guterres, la eliminación de los combustibles fósiles es inevitable; “esperemos que no llegue demasiado tarde”, dijo.

Hubo intensas negociaciones sobre si el resultado incluiría un llamado a “reducir progresivamente” o “eliminar gradualmente” los combustibles fósiles que calientan el planeta -como el petróleo, el gas y el carbón.

Limitar el calentamiento global a 1.5°C es uno de los objetivos clave establecidos en el histórico Acuerdo de París de 2015, lo cual “será imposible sin la eliminación progresiva de todos los combustibles fósiles”.

Guterrez está consciente que los plazos y objetivos podrían ser diferentes para los países con distintos niveles de desarrollo, pero deben estar en consonancia con “alcanzar el objetivo mundial de cero emisiones netas para 2050 y preservar el objetivo de 1.5 grados”
Pero el mismo responsable de la ONU para el clima, Simon Stiell, afirmó que en la COP28 se dieron “auténticos pasos adelante”, pero que las iniciativas anunciadas en Dubai son sólo “un salvavidas para la acción climática, no una victoria en la línea de meta”.

Sí, pero no

De acuerdo con Stiell la COP28 tendría que haber marcado un alto firme al principal problema climático de la humanidad: “los combustibles fósiles y su contaminación, que está quemando el planeta. Aunque aquí en Dubai no hemos pasado completamente la página de los combustibles fósiles, está claro que es el principio del fin”.

Un informe publicado por la misma Naciones Unidas en 2023 indica que para 2030, los gobiernos prevén producir un 110 por ciento más de combustibles fósiles por encima del nivel de producción estimado para limitar el calentamiento global a 1.5 °C; cifra que representa un 69 por ciento más de la producción máxima permitida para cumplir con el objetivo de 2°C.

La demanda mundial de carbón, petróleo y gas alcanzará su punto máximo en esta década (2020-2029), sin tener en cuenta nuevas políticas a favor de la extracción de combustibles fósiles que puedan surgir en el resto de década. En consecuencia, los gobiernos aumentarían su producción de carbón hasta 2030, y de la producción mundial de petróleo y gas al menos hasta 2050.

Se esperaría que los países eliminaran casi por completo la producción y el uso de carbón para 2040 y reducir al menos en un 75 por ciento la producción y el uso tanto del gas como del petróleo para 2050 respecto a los niveles de 2020. Los principales productores de combustibles fósiles planifican más extracciones a pesar de sus promesas climáticas.
 Según Guterres, “No podemos hacer frente a la catástrofe climática sin solucionar de raíz su principal causa: la dependencia de los combustibles fósiles. La COP28 debe transmitir un mensaje inequívoco de que a la era de los combustibles fósiles ya se le acabó su chispa, de que su eliminación es inevitable”.

Julio de 2023 fue el mes más caluroso jamás registrado, y con gran probabilidad el más caluroso de los últimos 120 mil años, según estudios científicos. En todo el mundo, las olas de calor, las sequías, los incendios forestales, las tormentas y las inundaciones han cobrado vidas y medios de subsistencia, lo que demuestra que el cambio climático causado por el ser humano ya está aquí. Las emisiones mundiales de dióxido de carbono, procedentes en un 90% de los combustibles fósiles, alcanzaron máximos históricos en 2021-2022.

“Los planes de los gobiernos para ampliar la producción de combustibles fósiles están socavando la transición energética que se necesita para lograr el objetivo de cero emisiones netas y están poniendo en jaque el futuro de la humanidad”, afirmó Inger Andersen, Directora Ejecutiva del PNUMA. “Alimentar las economías con energía limpia y eficiente es la única manera de acabar con la pobreza energética y reducir las emisiones al mismo tiempo”.

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