Acerca de la depresión

De la depresión aprendí a amarme y aceptarme, que no siempre la vida es acelerada, que tienes que cumplir todas tus metas como dicta la sociedad, a tener paciencia conmigo mismo, a amarme y a respetar mis tiempos.

También aprendí que una persona que tiene depresión crónica significa una situación bioquímica y no se hace la triste, no es flojera, no es falta de agradecimiento. Simplemente, cuando tienes depresión tu cerebro empieza a restar energía para que pares; cuando tu cerebro está en alerta todo el tiempo estás en supervivencia.

Muchas veces la depresión ocurre después de un hecho traumático; es una manera en que el cerebro aprende a disociar la realidad para sobrevivir. También puede ocurrir durante la gestación, cuando la madre sufre estrés en su embarazo. Si la madre tenía su sistema nervioso alterado, el bebé recibe ese estado de alerta. Y hay otras causas.

La depresión te quita energía, estás demasiado distraído, muchas veces te sientes solo, sientes que no encajas en el mundo, hay apatía por las cosas que antes te gustaban, procrastinas, puedes enfermarte muy seguido, tienes dolores de cabeza, insomnio, ataques de pánico. En algunos casos, la persona siente que su vida es demasiado difícil y hay más suicidios por este tema.

La depresión es una realidad que solo ocurre en tu cerebro; lamentablemente, en ese momento, todo es gris. ¿Cómo podemos detectar que tenemos depresión? En primer lugar, acudir a un especialista en salud mental: psicólogo, psiquiatra o neurólogo. Tienen que hacerte estudios para descartar otra enfermedad. Después de eso, es necesario recibir un tratamiento de acuerdo con el grado en el que te encuentres.

A mí me sirvieron mucho las terapias alternativas, como la meditación, el Reiki, la acupuntura china y la ayuda humanitaria. Ahora todo eso es parte de mi vida. Hoy aprendí que invertir en ti mismo es el mejor regalo de amor propio que podemos hacer por nosotros. La felicidad y la plenitud existen; perteneces a este mundo, eres importante y un ser maravilloso. Solo tenemos que decodificar la emoción que nos generó la depresión.

En algunos casos, cuando es bioquímico, te dan un tratamiento psiquiátrico por un lapso de tiempo para que tu cerebro empiece a generar dopamina, serotonina y para que tu amígdala reduzca la inflamación. Te recomiendo acompañarlo con la meditación y otras terapias holísticas, además de mejorar nuestra salud alimenticia, eliminar el azúcar de nuestro cuerpo, dejar el alcohol y el cigarro. Hacer ejercicio y contactar con la naturaleza serán complementarios para salir del estado de supervivencia.

De la depresión aprendí a ser empática con las personas y entender el mundo con amor. Es preciso amar a las personas incondicionalmente y entender que el mundo sufre por una salud mental inestable. Tu salud mental es importante para sentirnos plenos.

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