Quiero dejar claro que la despenalización de la marihuana en México no es una lucha ajena a las mujeres. Desde los inicios del 2006 no solo se ha visto su participación por fuera, también se ha caracterizado por el liderazgo frente a movimientos y, de manera más visible y segura, desde el 2015, cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) otorgó el primer amparo para el consumo lúdico de cannabis, promovido por una mujer.
Ella movió cielo, mar y tierra para poder ofrecerle a su hijo una alternativa medicinal, problema que una de cada 10 mujeres en los últimos 15 años padece.
El motor de la lucha para las mujeres ha sido, sin duda, el ejemplo de las madres que cultivan para mejorar la calidad de vida de sus hijos e hijas con alguna enfermedad o discapacidad. Éste es un punto que hay que resaltar porque estudios recientes han demostrado que uno de los usos más comunes de cannabis es para aminorar las náuseas y los vómitos provocados por la quimioterapia para el cáncer. Hace que una persona sienta ganas de comer.
Ayuda a personas que no comen lo suficiente y pierden peso debido a enfermedades como el VIH/SIDA y cáncer. Cabe recalcar que no solamente es usado en este tipo de padecimientos, el cannabis también puede ayudar en casos de asma, alzheimer, dolor crónico y glaucoma, entre otros.
Debemos romper el estigma y estereotipo del uso medicinal de esta planta porque ofrece beneficios y alternativas que son necesarias para los enfermos. De ahí que la preservación de cannabis es necesaria.
Por otro lado, respecto del uso lúdico de esta planta, las consumidoras, mujeres y madres, defienden el derecho sobre su cuerpo, el derecho al placer y al libre desarrollo de la personalidad. Es un tema muy importante debido a que es una lucha constante de libertad y de sentirnos seguras como mujeres consumidoras.
Se pide la despenalización porque actualmente las mujeres no tienen un espacio seguro ni la información necesaria para poder consumir de manera responsable. Es importante contribuir a romper el estigma y los estereotipos de la planta, tanto en uso medicinal como lúdico, debido a que la información científica y social nos puede brindar otro punto de vista en donde podamos incluir la prevención de riesgos y la educación necesaria.
Respecto de la regulación, México es uno de los países en donde aún sus autoridades no tienen los lineamientos para aprobar y verificar los productos que ya circulan en el mercado, lo que ayudaría a que las madres con hijos que sufren alguna enfermedad o síndrome tengan una alternativa segura en su país con las pruebas de calidad y seguridad necesarias.
La parte lúdica beneficia en la regulación de precios, en la educación para observar la flor que entrará a los pulmones, evitar alguna consecuencia médica y gozar de información.
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