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Los injustos Tratados de Versalles


Tenorio Figueroa Santiago

Todos sabemos que la Primera Guerra Mundial causó 10 millones de muertos y 20 millones de heridos. Cambió el panorama de visión del mundo y ocasionó un giro extremo a la geopolítica de la época.

La Entente, conformada por el Imperio Británico, Francia, Rusia y Estados Unidos, contra la Triple Alianza, donde se encontraba el imperio Alemán, Italia y el imperio Austrohúngaro. Posteriormente a la Gran Guerra surgieron países nuevos y se desmantelaron otros ya existentes.

Lo que cambió el panorama fue la derrota de la Triple Alianza y la traición de Italia, forzando a su rendición incondicional firmando los llamados: “Tratados de Versalles”.

Principalmente se obligó a disolver el imperio Alemán, que perdió sus territorios en África, Europa oriental y Alsacia y Lorena (cedieron 13% de su territorio) e igual perdieron una décima parte de su población, se les quitó y se les obligó tener a 100 mil hombres, igualmente eliminando todos los buques de guerra.

Se sometió a juicio al emperador Alemán y se le pidió el pago de 629.000 millones de marcos de oro (33.000 millones de euros). Por otro lado, a Italia no se le cumplió lo pactado por ganar la guerra; nunca se le recompensaron los territorios prometidos.

En un inicio, la deuda que se generó contra Alemania fue una exageración a niveles catastróficos, lo que ocasionó una deuda y una inflación enormes. Y perder 13% de su territorio ocasionó una ola de nacionalismo extremo, lo que causó la llegada de Adolf Hitler.

Los castigos impuestos a Alemania fueron injustos desde todos los puntos de vista; no se puede castigar a un país con deudas extremas. Sería malo tocarlo como una sanción, o sería incorrecto, igual fue una venganza por parte de los otros países. Con Italia el caso fue un poco diferente, pero a final de cuentas cayó en lo mismo, en un incumpliento y abuso de la Entente.

Podemos hacer notar cómo esas venganzas trajeron el surgimiento de dictadores. Mussolini y Adolf Hitler fueron consecuencia de la Entente, de las venganzas de esos países que se dicen profetizadores de la democracia. Todos sabemos qué sucedió unos años después. Los castigos fueron mínimos en comparación de los anteriores. Pero no cabe duda que los Tratados de Versalles fueron injustos.

Las opiniones vertidas en este texto son responsabilidad única y exclusiva del autor o de la autora.

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