Espacio Cultural / Raíces


news

México en la ONU


Luz María Mondragón

La Organización de las Naciones Unidas celebra 77 años de vida. México fue uno de los miembros fundadores de este símbolo global que nació el 24 de octubre de 1945.

Desde el principio se cinceló la unidad. Ha sido inmutable la unión entre México y la ONU. En ocho décadas han escrito una relación intensa y armónica. Mediante la concertación y el diálogo suman esfuerzos hacia soluciones a problemas y crisis mundiales, a favor de un orden internacional más justo.

México en el Consejo de Seguridad

El Consejo de Seguridad de la ONU tiene la responsabilidad primordial de mantener la paz y la seguridad internacionales. Integrado por 15 naciones-miembros. Cuenta con poder: todos los países integrantes de la ONU convienen en aceptar y cumplir sus decisiones. Es el único órgano cuyas determinaciones los Estados están obligados a cumplir.

Cuando se le presenta una controversia, la primera medida es recomendar a las partes llegar a un acuerdo por medios pacíficos. Si no funciona la recomendación, puede imponer embargos, sanciones económicas o autorizar el uso de la fuerza para hacer cumplir los mandatos.

Actualmente, por quinta ocasión, México ocupa un lugar en el Consejo de Seguridad, aunque no es permanente solo para periodo 2021-2022. Nuestro representante es Juan Ramón de la Fuente, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México, quien presidió el consejo del 1º al 30 de noviembre de 2021.

La presidencia del Consejo de Seguridad fue una gran oportunidad para México, pues es un espacio para potenciar la agenda nacional. Por ejemplo, el tema del tráfico de armas, punto fundamental en materia de seguridad nacional.

La participación mexicana en el Consejo de Seguridad se ha distinguido por su vocación constructiva, con apego al derecho internacional, especialmente a la Carta de las Naciones Unidas.

La representación nacional sigue los principios de política exterior plasmados en la Constitución: la autodeterminación de los pueblos, la no intervención, la solución pacífica de las controversias, la proscripción de la amenaza o uso de la fuerza en las relaciones internacionales, la igualdad jurídica de los Estados, la cooperación para el desarrollo y la protección de los derechos humanos.

Apuesta por la paz

La guerra Rusia-Ucrania cimbró al planeta. Impactó la economía de todos los pueblos. Y liberó un fantasma que recorre el mundo: el miedo a la devastación, como la causada por la I y la II Guerra Mundial.

El mundo medita cómo proteger la paz. Esa paloma de ala blanca y sedosa; lirio del viento, bajo el azul del cielo.

En busca del fin de la guerra Rusia-Ucrania, el presidente de México lanzó una propuesta pacifista al mundo: crear un comité para la paz, integrado por el presidente de India, Narendra Modi, el papa Francisco y el secretario general de la ONU, António Guterres.

Apoyo de la ONU a víctimas

La ONU ha colocado la lupa sobre algunos temas sociales de México: la militarización, la crisis de derechos humanos, las desapariciones forzadas y el desplazamiento forzado interno.

 *El Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas (CED, por sus siglas en inglés) visitó México, en noviembre de 2021. Recorrió 13 entidades. Conoció la visión dolorida de los familiares de más de 105 mil personas desaparecidas. Escuchó las denuncias. Concluyó: Agentes del Estado (servidores públicos federales, estatales y municipales) y crimen organizado son los responsables de las desapariciones.

Alertó: Crece la desaparición de niñas y niños a partir de los 12 años, aunque también se debe incluir a los adolescentes y a las mujeres. “Tendrían como objeto ocultar la violencia sexual, el feminicidio, la trata y la explotación sexual”. Y expresó su preocupación por los asesinatos de defensores de derechos humanos y de periodistas.

El CED arrojo luz sobre una particular preocupación: la victimización de las mujeres, porque durante las desapariciones son las que se quedan a cargo de las familias y también se encargan de la búsqueda de sus seres queridos, sin apoyo oficial. Además de los efectos sociales y económicos, ellas también son víctimas de violencia, persecución, estigmatización, extorsión y represalias. Urgió a generar cambios estructurales que erradiquen las desapariciones.

*Por primera vez en la historia, del 29 de agosto al 9 de septiembre de 2022, nos visitó la Relatora de la ONU Sobre los Derechos Humanos de los Desplazados Internos, Cecilia Jimenez-Damary. Recorrió Chiapas, Chihuahua, Ciudad de México y Guerrero. Atestiguó la situación del desplazamiento forzado interno que afecta a miles de personas.

La Relatora diagnóstico: México debe trabajar en la prevención y atención del desplazamiento interno forzado, así como en la protección de las víctimas, quienes padecen amenazas, intimidación y violencia.

Jimenez-Damary lamentó que México no cuenta con un registro nacional de víctimas, menos con políticas públicas que atiendan el drama social. Es necesaria una legislación que refleje los estándares internacionales en derechos humanos.

Recomendó aprobar la ley general de protección a desplazados internos, y la aplicación efectiva de la normatividad ya establecida como la Ley General de Víctimas.

El informe final sobre México se presentará en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en junio de 2023, en materia de desplazamiento forzado interno.

Por otra parte, el 9 de septiembre, la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Nada Al-Nashif, lamentó la militarización que vive México. Afirmó que el control de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sobre la Guardia Nacional, representa un retroceso en materia de derechos humanos y profundiza la militarización, que ni siquiera ha favorecido la reducción sostenida de la delincuencia.

Finalmente, 77 años más tarde recordamos aquella fecha remota de 1945, cuando nació la ONU.


Notas relacionadas