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Información de calidad evitará el embarazo adolescente


Aída Espinosa Torres

México ocupa el primer lugar a nivel mundial en embarazos en adolescentes entre los países integrantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada mil adolescentes. Muchas de ellas iniciaron su vida sexual bajo la influencia de la información que se difunde en redes sociales, por lo que se debe apelar a información de calidad, aseguran los expertos.

De acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Población, 23 por ciento de los adolescentes inician su vida sexual entre los 12 y 19 años de edad. 15 por ciento de los hombres y 33 por ciento de las mujeres no utilizaron ningún método anticonceptivo en su primera relación sexual. Es así que, de acuerdo con estos datos, aproximadamente ocurren al año 340 mil nacimientos en los que adolescentes mujeres se convierten en mujeres.

Además, se observa la tendencia de hacerlo a más temprana edad, y eso tiene que ver con las redes sociales a las cuales los jóvenes acceden. Ahí hay una cantidad importante de información falsa. También incide la educación que reciben en colegios o de sus seres cercanos, y que no es necesariamente adecuada, alertó Aline García Cortés, de la Facultad de Medicina de la UNAM.

Entre quienes iniciaron su vida sexual, la mayoría (97 por ciento) conoce al menos un método anticonceptivo; sin embargo, más de la mitad no usó ninguno en su primera relación sexual.

Riesgos

El embarazo adolescente, por lo tanto, aseguró la experta, genera muertes materna y fetal, porque se considera de alto riesgo. Hay mayor probabilidad de desarrollar enfermedades que pueden poner en riesgo la vida, por ejemplo, preeclampsia, parto pretérmino, diabetes gestacional o eclampsia. Por ello, “debe ser una estrategia disminuirlos, sobre todo para mejorar la salud de la mujer y disminuir la mortalidad materna”.

Respecto de las enfermedades de transmisión sexual, García Cortés precisó que en México la principal es la vulvovaginitis, con aproximadamente 140 mil casos reportados en 2019; a ese padecimiento se suman la candidiasis urogenital, la tricomoniasis, el VIH y el herpes genital. La OMS destaca que el virus de papiloma humano es la infección de transmisión sexual más frecuente en el mundo.

Prevención

Para la experta, a partir de edades tempranas debemos brindar herramientas y estrategias para que se tenga una vida sexual plena y responsable, además de acceso a los métodos de planificación familiar. “Hay que quitarnos el tabú de que no pueden empezar su vida sexual a tan temprana edad, porque sabemos que no sucede así. Ante las creencias y mitos que difunden influencers y otros usuarios de redes sociales, hay que ofrecer información de calidad”.

Es importante mejorar la educación y eso conlleva información correcta y fácil de entender, campañas de planificación, impulsar el autocuidado, postergar el inicio de la vida sexual y motivar los proyectos de vida de los jóvenes. Un adolescente puede pedir su método anticonceptivo sin estar acompañado de un tutor y llevar a cabo una sexualidad responsable, concluyó la experta universitaria.

El embarazo adolescente es un hecho que rompe el curso natural de crecimiento. Además de los riesgos físicos, causa abandono escolar, estigmatización social e implica un nivel de responsabilidad para el que no se está preparado física, psicológica o emocionalmente. Aurora Aguilar, directora general, Centro de Estudios para la Igualdad de Género (CELIG).

Políticas públicas

De acuerdo con lo difundido por la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes (ENAPEA), esta condición daña la salud, la permanencia en la escuela, los ingresos presentes y futuros; evita oportunidades recreativas, sociales y laborales especializadas, así como el desarrollo humano. Además, tener relaciones sexuales sin protección implica el riesgo permanente de adquirir una infección de transmisión sexual.

El objetivo general de la ENAPEA es reducir el número de embarazos en adolescentes en México con absoluto respeto a los derechos humanos, particularmente los sexuales y reproductivos. Sus dos grandes metas: a) Reducir el embarazo en adolescentes es una de las principales metas de la ENAPEA. Para ello, se plantea disminuir a cero los nacimientos en niñas de 10 a 14 años y reducir en 50 por ciento la tasa específica de fecundidad de las adolescentes de 15 a 19 años (TEF15-19) hacia el año 2030.

Trabajo legislativo

Con el objetivo de escuchar a las y los jóvenes e integrar sus propuestas en el proyecto de iniciativa de ley, la Comisión de Juventud de la Cámara de Diputados realizó en el mes de marzo el foro “Derechos Sexuales y Reproductivos de las Personas Jóvenes en México Rumbo a la Ley General de Juventudes".

La presidenta de la Comisión, diputada Karla Ayala Villalobos (PRI), dijo que “cada reunión, foro y participación nos lleva a concretar esta ley, que se encargará de ampliar el marco normativo existente; plasmará derechos y obligaciones que deben cumplir las instituciones y el gobierno; creará puentes entre instituciones y el Sistema Nacional de Juventudes”.

La diputada Marisol García Segura (Morena) puntualizó que revisarán el marco jurídico actual para modernizarlo a fin de que responda a las expectativas de las juventudes, garantizando su libertad y derecho a decidir de forma libre, autónoma e informada “desde el respeto a sus elecciones sexoafectivas, sexogenéricas y a la participación plena de sus derechos. Queremos buscar un diálogo, encontrar respuestas y tener esta ley que tanto hemos buscado”.

Gabriela Rivera, oficial nacional de Salud Sexual y Reproductiva, Adolescentes y Grupos Vulnerables del Fondo de Población de las Naciones Unidas, recomendó que la iniciativa de ley debe contemplar la prevención de embarazos en adolescentes con énfasis en adolescentes menores de 15 años, restitución de derechos de acceso a la justicia, a la educación y servicios de salud.

Además, impulsar la medición y la rendición de cuentas, aumentar las inversiones en derechos sexuales y reproductivos, en prevención del embarazo, asegurar el abasto de anticonceptivos y el acceso a los servicios de interrupción legal del embarazo.

Dulce Ramos Gutiérrez, subdirectora de Integración y Seguimiento del Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve), destacó que en la nueva ley general se debe garantizar una partida presupuestal destinada a atender a las juventudes y adolescencias, a fin de que realmente sean tomadas en cuenta.


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