Prácticamente ha concluido el debate nacional sobre la reforma al Poder Judicial. En todo el país se realizaron foros, espacios de diálogo y reflexión para trazar sus principales líneas. El acento del análisis es ¿cómo garantizar los mejores perfiles de los juzgadores, la idoneidad, los criterios de elegibilidad, así como los mecanismos de ascenso y remoción?
Los cambios al régimen político mexicano, unos auspiciados por el entorno internacional y, los más, surgidos desde el poder y las demandas sociales, pasan por el tamiz de la legalización que se encuadra en los marcos normativos de la Constitución y sus leyes secundarias. El meticuloso investigador que desee hacer un análisis retrospectivo de cualquier periodo de la historia en cuanto a los cambios que dieron un nuevo rostro al Estado mexicano, puede hacerlo a partir de la legislación que da sustento y sustancia al régimen político que rige los destinos de una nación en un determinado periodo.
La historia de la LXV Legislatura comenzó el 1º de septiembre de 2021. Aunque su trabajo legislativo concluye este 31 de agosto, escribió una historia sin fin. Cinceló un legado para la posteridad sintetizado en una placa que potencia sus significados y es inspiración para las siguientes legislaturas: paridad, diversidad e inclusión, triada inédita.
Lastimera y dolorosa es la migración de mano de obra de sur a norte. Es un fenómeno originado en la marginación y la pobreza de países expulsores centro y sudamericanos, africanos y de otras latitudes hacia los países ricos del hemisferio norte. Pero hay otra diáspora que no se ve, por selectiva, alentada por empresas bajo el incentivo de que obtendrán ingresos altos y un mejor nivel de vida. La fuga de cerebros resulta estar financiada por el Estado sin que al mercado le cueste un centavo.